El Ideal de Servicio, esencia del Rotary

Es preferible llevar a cabo acciones importantes en interés de nuestros semejantes que desperdiciar nuestro tiempo o consagrarlo a las nimiedades del propio interés. Es enriquecedor e instructivo salir en ocasiones de nosotros mismos e ingresar a las vidas de nuestros amigos.

Somos meras fracciones infinitesimales de un gran todo, porque ningún hombre es completo o suficiente en si mismo. La medida de nuestro éxito, en el sentido integral, depende del grado en que logremos ponernos a tono con nuestro entorno y en la medida en que logremos ajustarnos al gran todo.

El interés propio es una fuerza de extraordinario poder y a través de ella, bien aplicada, el mundo logra sus más sustanciales adelantos. La consagración inadecuada y obsesiva a los intereses propios es autodestructiva y no sirve al mundo en ningún aspecto.

La vida constituye un proceso educativo y la mayor lección que podemos aprender es la del sacrificio propio. Tarde o temprano debemos llegar a él. En último término nos veremos separados de nuestro propio yo. Entre más nos familiaricemos con esa idea ahora menos tendremos que aprender más adelante.

La providencia ha provisto varios medios para trascender de nuestra propia persona y nuestros intereses privados: entre ellos se cuentan nuestras familias y nuestras amistades. El rotarismo es un proceso educativo. Busca preparar a los hombres para obtener el mayor éxito posible en sus actividades, mostrándoles que deben construir junto con los demás, y no en su contra; a través de su especial estructura, Rotary brinda a cada socio una inigualable oportunidad para poner en práctica el ideal de servir a los demás.

Rotary representa a la sociedad en sí misma, condensada y comprehensible. Los principios que los rotarios ponen en práctica en el curso de su conducta a los demás pueden ser considerados reglas para la vida. Proporcionarán mayores éxitos en la vida, así como mejores ciudadanos. El interés propio es congruente y armónico con los intereses de la sociedad misma, como lo ilustra el lema: "Se beneficia más el que mejor sirve".

Paul P. Harris
Extracto de Carta Inédita del 29 de Febrero de 1912
- Artículo de Joaquín Mejía (condensado), en Nueva Revista Rotaria, Enero/Febrero 1997